* Producto sujeto a disponibilidad.
* Envios exprés a todo México.
La Clorpromazina es un medicamento neuroléptico perteneciente a la familia de las fenotiazinas y está categorizado dentro de los antipsicóticos típicos para tratar la esquizofrenia sin sedar, es decir, manteniendo la conciencia.
Además, es muy útil para tratar las psicosis agudas, manifestaciones agresivas en niños y adultos, entre otros padecimientos psiquiátricos.
La absorción de la Clorpromazina se produce completamente entre las 2 a 4 horas y su efecto es de 10 horas, eliminándose el 35% del medicamento a través de la orina.
Contenidos
¿Cuál es el precio de Clorpromazina?
En México, la Clorpromazina puede encontrarse en un precio que oscila los 100 y 130 pesos mexicanos; aunque, por el momento, solo puede comprarse en farmacias o supermercados físicos, así como en algunas tiendas en línea.
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Presentaciones
La Clorpromazina puede encontrarse en cajas con:
- 50 tabletas de 25 mg
- 20, 50 y 100 tabletas de 100 mg
- 5 ampolletas de solución inyectable de 5 mg/5 ml
- 1 frasco con 30 ml de gotas orales con una solución de 40 mg
En México, también puede ser encontrada en versión genérica o bajo los nombres comerciales de: Largactil, Ampliactil, Torazina y Promapar.
¿Qué son los neurolépticos?
Un neuroléptico o antipsicótico es un fármaco que regularmente se utiliza para el tratamiento de las psicosis.
Los neurolépticos ejercen modificaciones fundamentalmente en el cerebro y están indicados especialmente en casos de esquizofrenia, trastornos bipolares y episodios maníacos con o sin síntomas psicóticos por el uso de drogas.
Asimismo, se indican en el tratamiento de enfermedades como depresión, lesiones cerebrales o enfermedades de agresividad, demencias o síndromes confusionales agudos.
Dosis y vía de administración
Vía de administración: Oral e intramuscular.
La dosis debe ser ajustada de forma individualizada para cada paciente según su respuesta clínica y tolerancia.
La dosis generalmente fluctúa entre 25 y 500 mg, cada 24 horas. Mientras que, la dosis de mantenimiento se encuentra entre 75 y 150 mg, cada 24 horas.
- Adultos: Tomar de 75 a 150 mg de Clorpromazina en 3 tomas, cada 24 horas. Comenzando por dosis diarias débiles (25-50 mg) y aumentando progresivamente hasta alcanzar la dosis útil, pero sin sobrepasar los 300 mg al día, salvo casos particulares
- Niños de 1 a 5 años: Administrar 1 mg de Clorpromazina al día por kilogramo de peso, aunque a partir de esta edad podrá administrarse un 1/3 o 1/2 de la dosis del adulto, según el peso; pero nunca debe utilizarse en niños menores de 1 año
Importante, las dosis recomendadas son indicativas y siempre se deberá consultar a un médico antes de tomar Clorpromazina.
Contraindicaciones y advertencias
Este medicamento está contraindicado en niños menores de 1 año, mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, así como en pacientes con:
- Tratamientos barbitúricos
- Insuficiencia hepática y renal
- Hipertensión arterial y epilepsia no tratada
- Depresión de la médula ósea, glaucoma y prostatitis
- Hipersensibilidad al principio activo o a las fenotiazinas
- Discrasias sanguíneas (alteración permanente de la sangre)
- Parkinson (trastorno que afecta el movimiento y suele ocasionar temblores)
- Arteriosclerosis cerebral (acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias en las paredes de las arterias)
Advertencias:
- Se ha reportado hiperglucemia o intolerancia a la glucosa
- En los tratamientos prolongados se recomienda control oftalmológico (de la presión ocular) y hematológico
- Se debe advertir a todos los pacientes que deben informar a su médico si experimentan: fiebre, dolor de garganta, úlceras en la boca o cualquier otra infección y deberán someterse a un análisis completo de sangre
Clorpromazina y Alcohol
Al tomar Clorpromazina deberá evitarse el consumo de alcohol, ya que éste puede potenciar los efectos de sedación y somnolencia; además, aumenta el riesgo de sufrir mareos o desmayos.
Efectos secundarios
Este medicamento puede tener efectos adversos, aunque no todas las personas los sufran, tales como:
- Somnolencia y sedación
- Intranquilidad o ansiedad
- Cambios en el color de la piel
- Dilatación o contracción de las pupilas
- Falta de algunos períodos menstruales
- Sequedad bucal, congestión nasal y dificultad para orinar
- Flacidez en los senos y disminución de la capacidad sexual
- Falta de expresión en el rostro y arrastrar los pies al caminar
- Hiperprolactinemia (nivel más alto de la hormona prolactina en la sangre)
- Movimientos extraños, lentos o incontrolables de cualquier parte del cuerpo
Importante, dichos síntomas generalmente desaparecen al suspender el tratamiento, pero si empeoran o persisten consulte a su médico.