Manzanilla
Manzanilla qué es y para qué sirve
La manzanilla es una planta medicinal ampliamente utilizada en la medicina tradicional debido a sus propiedades terapéuticas. Su nombre científico es Matricaria chamomilla y se caracteriza por tener un aroma suave y agradable. La parte de la planta que se utiliza con fines medicinales son las flores, las cuales contienen compuestos activos como flavonoides, cumarinas y aceites esenciales. La manzanilla se ha utilizado durante siglos para tratar una variedad de dolencias y afecciones, gracias a sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, sedantes y digestivas. Algunos de los usos más comunes de la manzanilla en medicina incluyen: 1. Trastornos digestivos: La manzanilla se utiliza para aliviar problemas digestivos como la indigestión, los cólicos, la acidez estomacal y la inflamación intestinal. 2. Problemas de la piel: Gracias a sus propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes, la manzanilla se utiliza para tratar afecciones de la piel como quemaduras, irritaciones, eczema y dermatitis. 3. Ansiedad y trastornos del sueño: La manzanilla tiene efectos sedantes suaves que pueden ayudar a reducir la ansiedad, el estrés y mejorar la calidad del sueño. 4. Afecciones respiratorias: La manzanilla se utiliza para aliviar síntomas de resfriados, gripes, bronquitis y alergias respiratorias, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y descongestionantes. Es importante tener en cuenta que, aunque la manzanilla es considerada segura para la mayoría de las personas, algunas personas pueden ser alérgicas a esta planta. Por lo tanto, se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier tratamiento con manzanilla, especialmente si se está embarazada, amamantando o tomando otros medicamentos. Referencia: https://www.vademecum.es/principios-activos-manzanilla-matricaria-CHP0-1