Carboximaltosa ferrica
Carboximaltosa ferrica qué es y para qué sirve
La carboximaltosa ferrica es una sustancia activa utilizada en medicina para el tratamiento de la deficiencia de hierro en el organismo. Se trata de un complejo de hierro de alta biodisponibilidad que se administra por vía intravenosa. El hierro es un mineral esencial para el cuerpo humano, ya que desempeña un papel fundamental en la formación de hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno en la sangre. La deficiencia de hierro puede provocar anemia, fatiga, debilidad y otros problemas de salud. La carboximaltosa ferrica se utiliza en pacientes que no pueden recibir hierro por vía oral o que no responden adecuadamente a los tratamientos convencionales. Este medicamento se administra en forma de infusión intravenosa, lo que permite una rápida absorción y una mayor eficacia en comparación con otros tratamientos de hierro. Entre los principales usos de la carboximaltosa ferrica se encuentran: - Tratamiento de la anemia ferropénica en pacientes con enfermedades crónicas como insuficiencia renal, enfermedad inflamatoria intestinal o cáncer. - Corrección de la deficiencia de hierro en pacientes que han perdido sangre debido a cirugías, traumatismos o menstruaciones abundantes. - Mejora de los niveles de hierro en pacientes con intolerancia a los tratamientos convencionales de hierro oral. Es importante tener en cuenta que la carboximaltosa ferrica debe ser administrada por personal médico especializado y bajo supervisión, ya que puede causar reacciones adversas en algunos pacientes. Es fundamental seguir las indicaciones del médico y realizar los controles necesarios durante el tratamiento. Referencia: https://www.vademecum.es/principios-activos-carboximaltosa+ferrica-j01xx07-1